Carlos tiene una empresa a nivel internacional de energías renovables, había adquirido hacía poco una casa familiar, justo arriba de sus padres, en el casco antiguo, y quería una reforma integral. Además de que puso hincapié en la estética elegante y sencilla, lo que más le preocupaba era que la casa tuviera una buena ventilación e iluminación, y que el consumo se redujera a la mitad, aprovechando la luz solar y la inercia térmica. Así que, ¡manos a la obra! Subimos techos de la planta superior, realizamos una escalera volada con lucernario y una terraza en la cocina. El espacio de día serían las terrazas y la cocina, y las zonas de tardes y noches, el comedor. Se enfrentaron ventanas para propiciar corrientes de aire, se colocaron persianas regulables y dirigibles, se dispusieron aleros en terrazas, junto con la colocación de cristales con control solar. Todo esto, añadido al uso de materiales nobles, una selección de mobiliario y un buen proyecto de iluminación junto a carpinteros y artesanos de la zona, consigue hacer de este proyecto un espacio amable, elegante y sencillo.